20 Mandamientos de la Madre Teresa
Se cree que la Madre Teresa fue una de las mujeres más influyente en el mundo, y su vida, uno de los eventos más importantes del siglo XX. Los logros de esta religiosa son realmente impresionantes. Sin duda, fue una de las personas que pudo hacer la diferencia.
- Para promover la paz mundial, vete a casa y ama a tu familia.
- No necesitamos armas y bombas para traer paz, necesitamos amor y compasión.
- Es fácil amar a los que están lejos, pero no siempre es fácil amar a los que tenemos más cerca.
- Si juzgas a la gente, no tienes tiempo de amarla.
- Para formar una familia basta amar. Pero para conservarla debes aprender a tolerar y perdonar.
- No dejes que nadie venga a ti sin dejarlo más feliz.
- Las críticas no son otra cosa que orgullo disimulado. Un alma sincera para consigo misma nunca se rebajará a la crítica. La crítica es el cáncer del corazón.
- Amar al prójimo debe ser tan natural como vivir y respirar.
- Ama y que el amor sea para ti tan natural como la respiración. No exijas nada. No esperes nada. Si viene algo a ti, agradécelo. Si no viene nada, no lo necesitas.
- El medicamento más importante es el amor y la atención.
- No todos podemos hacer grandes cosas. Pero podemos hacer pequeñas cosas con gran amor.
- Después de haberte decepcionado de una persona, no castigues a la otra. Todos somos diferentes. No pierdas la habilidad de confiar, creer y amar.
- Las palabras amables pueden ser cortas y fáciles de decir, pero sus ecos son realmente infinitos.
- No importa lo que hagas, sino cuánto amor le pongas.
- Sonríele a tu mujer, sonríele a tu marido, sonríeles a tus hijos; no importa a quién le sonrías, esto te ayudará a sentir más amor hacia la gente. Nunca sabremos todo lo bueno que una simple sonrisa puede hacer.
- El trabajo sin amor es esclavitud.
- Yo sé que Dios no me dará algo que yo no pueda soportar. Aunque me gustaría que él no confiara tanto en mí.
- Por dondequiera que vayas, difunde el amor; ante todo en tu propia casa.
- El amor es una fruta de temporada en todo momento y al alcance de la mano de todos.
- No me inviten a una marcha en contra de la guerra; si es a favor de la paz, entonces iré.
- No hay mayor pobreza que la pobreza del corazón.
